Reseña Histórica
PROVINCIA SAN JUAN BAUTISTA DEL PERÚ
Los primeros dominicos que salieron de España con destino al Perú hacia el año 1529, fueron seis: Fr. Reginaldo de Pedraza, Fr. Alonso Burgalés, Fr. Pedro Yépez, Fr. Vicente Valverde, Fr. Tomás de Toro y Fr. Pablo de la Cruz. En la larga travesía de España hasta Panamá, sólo llegaron dos a este centro misional que en ese momento unía dos mundos y dos mares: Fr. Vicente Valverde y Fr. Tomás de Toro. Ellos acompañaron a Francisco Pizarro hacia el sur, recorriendo sendas tropicales y desconocidas en busca del fabuloso Imperio Incaico. Llegados a Tumbes, primera ciudad incaica, Fr. Tomás de Toro regresó a Panamá, donde se quedó y fue nombrado Obispo de Cartagena. El P. Valverde quedó solo como religioso y misionero en los gravísimos acontecimientos de la conquista del Incario y acompañó a Pizarro en la fundación de las primeras ciudades del Perú colonial.
Luego de la llegada de los españoles, en pocos años, entre 1535-1538, arribaron al Perú tres o cuatro grupos numerosos de dominicos, cuidadosamente escogidos. Los documentos de la época han conservado algunos nombres, como los de Gaspar de Carvajal, Pedro de Ulloa, Martín Esquivel, Tomás de San Martín, entre otros.
Los religiosos, considerando la distancia que los separaba de la isla Española, sede de la Provincia de Santa Cruz de la que dependían jurídicamente, enviaron a Fr. Francisco Martínez y Fr. Agustín de Zuñiga al Capítulo General de Lyon (Francia), para pedir la creación de una nueva Provincia.
Los capitulares “aceptaron su petición y erigieron la Provincia”. La Bula de creación fue expedida por el Papa Paulo III el 23 de diciembre de 1539; y el 4 de enero de 1540, el Maestro de la Orden, Fr. Agustín Recuperato de Favencia firmaba en Roma las patentes de la nueva Provincia.
El 12 de mayo de 1551 por gestiones del Provincial fr. Tomás de San Martín, se funda el primer Estudio General, que hoy se conoce como Universidad de San Marcos, la primera de América del Sur. Este fraile también se preocupó de la educación elemental de los naturales llegando a fundar hasta sesenta escuelas.
Atendiendo a las necesidades prioritarias, nacidas de las acciones de guerra de la conquista, Fr. Jerónimo de Loayza, OP; primer Arzobispo de Lima, construye el Hospital de Santa Ana para los naturales y negros. Fr. Domingo de Santo Tomás, segundo provincial, propicia las primeras casas de recogimiento para niños y niñas abandonados; propugna los principios de la justicia social en defensa de los naturales; reduce el idioma quechua al sistema gramatical y escribe el primer catecismo en quechua.
El año 1571, fr. Vicente Justiniani, Maestro de la Orden, desmembra de la Provincia Peruana la Provincia de San Antonino de Colombia, “hoy San Luis Beltrán” y el año de 1586, Fr. Sixto Fabro de Luca, Maestro de la Orden, separa las Provincias de Santa Catalina Mártir (hoy Santa Catalina de Sena) de Ecuador y la de San Lorenzo de Chile, quedando la Provincia Peruana con 30 conventos y 60 doctrinas.
Destacaron en la historia de esta benemérita Provincia:
Siglo XVI : Fr. Gaspar Carvajal, Fr. Juan Olías, Fr. Pedro de Ulloa, Fr. Martín Esquivel.
Siglo XVII : Fr. Juan de Lorenzana, Fr. Diego de Ojeda, Fr. Francisco de Vega, Fr. Vicente
Bernedo y Fr. Juan Meléndez. Además, cuatro grandes figuras de santidad: San
Martín de Porres, San Juan Macías, Santa Rosa de Lima y la beata Ana de los
Ángeles Monteagudo.
Siglo XVIII : Fr. Juan Gazitua, Fr. Manuel Sánchez guerrero, Fr. Juan Moreno.
Siglo XIX : Fr. Jerónimo Cavero, Fr. Vicente Zea, Fr. Mariano Zenteno, Fr. José Vicente
Seminario y Fr. Bernardo Alcedo.
En el proceso de emancipación nacional, a lo largo del siglo XIX, la Provincia peruana pasó por la crisis más aguda de su historia. Muchos frailes de origen español volvieron a la Península; todos los canales de comunicación con los Superiores de Roma fueron cortados; por Decreto Supremo del 23 de marzo de 1822 fue destituido el Provincial Fr. Jerónimo Cavero y en cierta manera disuelta la Provincia. Mediante otro nuevo decreto del 28 de setiembre de 1826, se suprime los conventos de Santo Tomás, de la Recoleta y de Santa Rosa y todos los que no contaban con ocho frailes; y así la Provincia quedó reducida solo a tres conventos.
RESTAURACIÓN DE LA PROVINCIA
La ocasional visita de Fr. Vicente Nardini (de eterna y agradecida memoria) en 1879 suscitó en el dominico italiano el anhelo de restaurar la antigua y benemérita Provincia Peruana. Conseguidas las facultades de Visitador y Vicario General (1881), trabajó tan ardua y provechosamente que el 4 de agosto de 1897, el Maestro de la Orden, Fr. Andrés Fruhwirth, en su decreto Peruvianis Regionibus, restituyó a la Provincia todos sus derechos como los tienen todas las Provincias de la Orden.